martes, 16 de abril de 2013

aprender la lección es inútil


Sabes que, a veces, te quiero.

Pero hoy más que nunca
te necesito.

Cerca. Muy cerca.

Yo te pago las cervezas.

Hoy que sufro la resaca de mi vida,
que siento perder el control
y me he vuelto exagerado y violento.

Necesito que me escuches.

Que sueltes consejos,
preocupada,
aunque sepas que no sirven para que yo escarmiente,
pero aprendo
a volver a caer con más estilo.

Necesito tu indulgencia

porque ese no era yo,
pero no era otro a quien echar la culpa.

Necesito que cambies de tema
y me pierda.
Porque aun estoy envenenado.

Que me mientas y me digas:
“no pasa nada”

que me llames gilipollas
y te entren ganas de partirme la cara
o incluso de follar conmigo
por idiota.

Pero,
por encima de todo,
necesito que sonrías para mí.

Yo te pago las cervezas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario